Los antibióticos y el alcohol como evitar sus efectos secundarios

¿Qué son los antibióticos?

Los antibióticos son medicamentos que combaten infecciones causadas por bacterias en los seres humanos y los animales ya sea matando las bacterias o dificultando su crecimiento y multiplicación.

Es importante aclarar que los antibióticos solo tratan infecciones causadas por bacterias como infecciones urinarias, de la garganta causadas por streptococcus, de la boca….

Un antibiótico nunca servirá para tratar una infección vírica como por ejemplo el SARS COVID, la gripe o el resfriado común por lo que recordamos que se debe hacer un uso racional de los medicamentos y los antibióticos siempre deben ser prescritos por un médico. Tampoco estos medicamentos antibacterianos sirven para tratar infecciones causadas por hongos como Cándida.

¿Qué efectos secundarios pueden producir los antibióticos?

En la mayoría de los casos, los antibióticos no deben producir efectos secundarios graves salvo en casos de alergia o hipersensibilidad a los antibióticos.

En el caso de manifestarse alguno de los siguientes síntomas se deberá suspender el tratamiento y acudir de inmediato a urgencias si se presenta:

• Urticaria
• Picor
• Inflamación de párpados o labios
• Erupciones en la piel
• Anafilaxia: sensación de ahogo, vómitos, mareo e incluso pérdida de la consciencia.

Estos síntomas de alergia a algún medicamento no son tan frecuentes, sin embargo existen otros síntomas más frecuentes que son los siguientes:

• Náuseas: para evitarlas se aconseja no hacer comidas muy copiosas, realizar las cinco comidas diarias recomendadas y seguir una dieta saludable que evite los procesados y los fritos.
• Fatiga: este síntoma no es producido por la toma del antibiótico sino por la infección que se presenta y también puede producirse cansancio o somnolencia por la pérdida de la microbiota intestinal. Para ello aconsejamos tomar un probiótico cuando nos prescriban un antibiótico para evitar esos síntomas de pérdida de flora intestinal y de cansancio. 
• Diarrea por antibióticos. Es el síntoma más frecuente de este tipo de medicamentos y se debe a que se produce una destrucción de flora bacteriana del intestino. Todo ello afectará al sistema inmunitario y a la capacidad de absorber algunos nutrientes en el intestino provocando diarreas, cansancio y falta de algunas vitaminas.
• Infecciones por cándida. Debido a una disminución de la flora bacteriana vaginal se puede producir esta infección molesta caracterizada por picor en la zona íntima, flujo y escozor.

En resumen, los antibióticos destruyen tanto a las bacterias patógenas como a las sanas que tiene nuestra flora intestinal y vaginal por lo que aconsejamos la toma de probióticos siempre que nuestro médico nos prescriba un antibiótico. De este modo evitaremos las diarreas, infecciones por cándida y demás síntomas poco agradables producidos tras la toma de antibióticos.

Complementos probióticos para tomar con antibióticos:

En nuestra parafarmacia online ponemos a su disposición los siguientes probióticos eficaces para prevenir los efectos indeseables de los antibióticos:

Conviene recordar que debemos espaciar siempre la toma del probiótico dos horas con respecto a la toma del antibiótico. Esto quiere decir que si por ejemplo tomamos un antibiótico cada 8 horas (a las 8h, a las 16h y a las 22h) el probiótico debe tomarse transcurridas dos horas del antibiótico (por ejemplo a las 10h, 18h o 24h)

¿Se pueden tomar antibióticos con alcohol?

Esta pregunta seguro que nos la hemos planteado en muchas ocasiones y el sentido común nos dice que no es lo más apropiado pero hoy en Onlyfarma explicaremos las razones por las que puede ser perjudicial para la salud mezclar los antibióticos con alcohol.

En primer lugar, beber cantidades superiores de alcohol a lo que contiene una copa de vino o una cerveza se desaconseja totalmente a nivel de salud y más si se ingiere con antibióticos.

Además, existen algunos grupos de antibióticos que si se toman con alcohol pueden provocar un peligro grave de salud manifestándose los siguientes efectos importantes:

• Vómitos
• Arritmias
• Alucinaciones
• Somnolencia

Razones por las que no se aconseja tomar bebidas alcohólicas con antibióticos

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha relacionado el consumo de alcohol a numerosas enfermedades. Además, tener un consumo moderado de alcohol puede ser un factor de riesgo para desarrollar diferentes tipos de cáncer.

Por todo ello, los profesionales de la salud recomiendan consumir la menor cantidad de alcohol posible (una copa de vino máximo) para promover un buen estado de salud.

Además, la primera razón por la que se desaconseja el consumo de alcohol cuando se tomen antibióticos es porque ambos requieren metabolizarse por el hígado. Si se combinan ambas cosas, el hígado trabajará en exceso y es probable que se tarde en absorber el medicamento por lo que puede verse disminuida la acción del antibiótico. También, debemos recordar que nuestro hígado puede sobrecargarse y que puede desencadenarse un daño hepático si se continua con la ingesta de alcohol y de antibióticos a la vez.

Otra de las razones por las que no se aconseja consumir alcohol es debido a que cuando nos prescriben un antibiótico nuestro sistema inmune está más debilitado y la ingesta de alcohol disminuye aún más nuestro sistema inmune por lo que se desaconseja totalmente ingerir alcohol en infecciones.

Como hemos visto antes, el alcohol puede disminuir la eficacia de los antibióticos por lo que para evitar ese acontecimiento debemos reducir la ingesta de alcohol a únicamente una copa de vino o una cerveza y evitar siempre que se pueda el alcohol mientras tomemos los antibióticos.

Antibióticos que se desaconseja tomar con alcohol

Existen antibióticos que si se toman con alcohol pueden provocar grandes problemas de salud como:

• Metronidazol y tinidazol: estos fármacos interaccionan con el alcohol impidiendo su metabolismo y provocan mareos, vómitos, alteración del ritmo cardiaco y dolor de cabeza.
• Doxicilina: con el alcohol puede verse disminuida su eficacia y puede provocar efectos graves como arritmias, alucinaciones, calambres y somnolencia.
• Linezolid: interacciona con el vino, cerveza y sidra provocando daños en el hígado y aumento de la presión sanguínea.

En resumen, si mezclamos antibióticos con alcohol podemos tener efectos secundarios leves o muy graves en función del fármaco que tomemos y también en función de la cantidad de ingesta de alcohol.

En conclusión, es mejor evitar el consumo de alcohol mientras se toman antibióticos. Si tiene alguna pregunta sobre cómo tomar sus antibióticos, hable con su médico o farmacéutico para obtener más información y recomendaciones específicas sobre su tratamiento.

Desde Onlyfarma esperamos que este artículo os haya sido útil, recordad que siempre estamos disponibles para resolver cualquier duda o pregunta acerca de los antibióticos y cómo prevenir efectos secundarios a través de nuestro whatsapp o teléfono.

ESCRITO POR:

María Suárez Santillán

Licenciada en Farmacia por la Universidad Complutense de Madrid.

Colegiada número 21421 del Colegio Farmacéutico de Madrid.

SOBRE MI:

Licenciada en Farmacia desde Marzo 2014, desde el inicio de la carrera he sentido atracción por la atención farmacéutica y ofrecer un trato personalizado al paciente. Asisto regularmente a cursos y formaciones organizados por el COFM, CSIF y la plataforma Mi Farma Formación para estar al día en las últimas tendencias y avances.

Desde el año 2019 formo parte del equipo de Onlyfarma y puedes encontrarme atendiendo a nuestros pacientes en la oficina de farmacia en la Calle Campiña 12 de Madrid.

Estoy entusiasmada por poder ofrecer información y consejos en nuestro blog a pacientes que quieran alcanzar un estilo de vida más saludable, o simplemente conocer más sobre algún tema relacionado con la salud.

Además de mi formación general en farmacia, he desarrollado una especialización en dermofarmacia. Me encanta trabajar con pacientes que tienen problemas de piel y ayudarlos a encontrar soluciones eficaces y seguras para sus necesidades. He estudiado en profundidad los productos y tratamientos y cómo pueden afectar a diferentes tipos de piel. Me siento altamente capacitada para ayudar a mis pacientes a encontrar los productos y rutinas adecuadas para sus problemas dermatológicos y trabajar con ellos para lograr los resultados deseados.